No olvides solicitar que te den información sobre el cambio de moneda en recepción, es donde obtendrás la mejor tasa sin comisiones.

Ubicación excelente para explorar la ciudad.

a) Personal amable
b) Desayuno variado
c) Ubicación céntrica

a) Habitaciones pequeñas
b) Insonorización deficiente
c) Falta de renovación

La atención del personal fue excepcional, siempre con una sonrisa.

La limpieza dejaba mucho que desear, ya que el cabezal de la cama tenía polvo y el baño no estaba del todo limpio. Además, la insonorización era deficiente y se oía todo lo que pasaba en el pasillo y en las habitaciones vecinas. La cama estaba coja, lo que hizo que dormir fuera incómodo.

Ubicación inmejorable en el barrio judío, al lado del New York Café. Instalaciones cómodas y limpias. ¡Vaya que el desayuno tiene de todo, desde fiambre hasta bollería!

Sin embargo, la habitación era más pequeña de lo que esperaba—casi podía escuchar los sueños de mis vecinos.

No puedo creer que este hotel tenga cuatro estrellas. La limpieza era lamentable. el cabezal de la cama tenía un dedo de polvo. Además, esperaba un tratamiento especial, como un regalo de bienvenida, y solo recibí decepción. Definitivamente no volveré a un lugar que no cumple con expectativas mínimas, casi escribí una buena reseña, pero no pude.

El personal de soho boutique fue increíble y siempre dispuesto a ayudar. incluso nos prestaron un cargador cuando lo necesitábamos. además, la variedad en el desayuno es excelente, ¡hay algo para todos los gustos!

las paredes son delgadas 😅.

La ubicación del Soho Boutique es excelente, facilitando el acceso a lugares clave de la ciudad. La habitación era cómoda, con una cama de calidad que me permitió descansar bien durante mi viaje de trabajo. El desayuno ofrecía una buena variedad de opciones, incluyendo panes frescos y zumos orgánicos que son un gran complemento para comenzar el día.

El aire acondicionado no funcionaba adecuadamente, afectando mi comodidad.

La ubicación es simplemente increíble

Pasamos cuatro noches aquí y la ubicación es perfect, justo en el barrio judío y a un paso de la Sinagoga. El desayuno era súper rico, con muchas opciones húngaras. Solo que la habitación era un poco pequeña, lo que lo hizo un poco incómodo en algunos momentos. Pero la atención del personal fue de diez, siempre sonriendo y ayudando.

La estancia fue buena, especialmente por la ubicación, que me permitió visitar varios lugares interesantes como el Museo Nacional Húngaro y el Mercado Central, todo a un corto paseo. La habitación era amplia, aunque de diseño peculiar por las salidas de emergencia, y bastante cómoda a pesar de algunos detalles menores. Me encantó que había una excelente cafetería llamada Sarajevo Bakery cerca, donde disfruté de una buena comida. Sin embargo, hay que tener en cuenta que las sábanas no estaban del todo en óptimas condiciones, lo cual fue un pequeño inconveniente.

La ubicación del hotel es inmejorable, permitiendo acceder a varios lugares emblemáticos fácilmente. El desayuno es abundante y incluye productos de cosecha propia que realmente se disfrutan. Sin embargo, la habitación es algo pequeña y la insonorización podría mejorar, ya que se oía ruido del pasillo. El aire acondicionado no funcionaba adecuadamente, lo que afectó la comodidad. En general, una experiencia buena, pero con algunos inconvenientes que deberían ser considerados.

La habitación era original y cómoda, aunque había un radiador goteando.

Recomendaría este lugar para una parada de una noche

Habitación cómoda, desayuno delicioso, además de una atención amable, lo que hizo que nuestra estancia fuera agradable y fácil de disfrutar, especialmente al estar tan cerca de las atracciones principales que se pueden visitar a pie, además el internet en la habitación funcionó perfectamente durante toda nuestra estancia.

No hay nada que mejorar.

La pasta casera en el restaurante cercano es un verdadero festín que no te puedes perder. Además, el desayuno buffet es un espectáculo, lleno de opciones húngaras que te hacen empezar el día con energía. Y si eres amante del vino, Veritas Winebar a solo 1 minuto es el lugar ideal para disfrutar de una buena copa después de un día explorando.

Las habitaciones son algo pequeñas, lo que puede ser un poco incómodo, aunque bien diseñadas. Aunque está a unos 20 minutos a pie del río, lo vale por el precio y lo atractivo de la zona.

Recomiendo para quienes buscan comodidad

La atención del personal fue bastante excepcional, especialmente cuando llegamos y el chico de la recepción nos ayudó con mapas y tickets de bus, muy útil, de verdad. Además, el desayuno tenía opciones que varían cada día, ¡fue genial encontrar pan sin gluten! Me siento afortunado de haber tenido esa experiencia.

No fue barato, pero aún así aceptable.